Formación para la vida, el sello del Liceo Industrial Óscar Corona Barahona.

 



Con más de 80 años de historia, este colegio ubicado en La Calera es la institución de educación media más antigua de la comuna. Su historia comienza en 1941, cuando el presidente de la época, Pedro Aguirre Cerda, creó la Escuela de Artesanos, que en sus inicios tuvo a 50 alumnos de la región.  Hoy cuenta con más de 700estudiantes e imparte cinco especialidades técnico-profesionales.

FICHA
- Nombre: Liceo Industrial Óscar Corona Barahona.
- Matrícula: 744 estudiantes (575 hombres 169 mujeres).
- Niveles: primero a cuarto medio.
- Especialidades: Construcción mención Edificación, Mecánica Industrial mención Electromecánica, Construcciones Metálicas, Electricidad y Electrónica.
- Ubicación: La Calera, Región de Valparaíso.

En 1993 se estableció su nombre actual, Liceo Industrial Óscar Corona Barahona, en homenaje a un destacado maestro que dedicó su vida a la educación, su gran pasión.  La misión que moviliza a este colegio es “entregar una educación integral de calidad, con sólidos valores éticos, espirituales, morales y humanos; para que nuestros estudiantes sean un aporte transformador en el desarrollo de sus familias, de las empresas y del país”, así lo señala su Proyecto Educativo Institucional (PEI).

 Al respecto, su directora, Marcela Noriel afirma que “el proceso de enseñanza aprendizaje se focaliza primordialmente en el logro de aprendizajes significativos, integrales y de calidad para todos sus estudiantes, independientemente de su origen socioeconómico”.

El profesor Víctor Campusano, quien se desempeña en el área de Construcción destaca la calidad del modelo educativo del Liceo. “Está basado en que los estudiantes puedan adquirir una formación ética, espiritual y moral para poder enfrentar sus relaciones humanas en la sociedad lo más equilibrada posible, teniendo como principio el respeto a la diversidad”, sostiene.

En el establecimiento hay tres sellos que se buscan plasmar en los estudiantes. El primero es una “Formación para la vida”, centrada en la apropiación de los valores contenidos en el PEI propiciando un equilibrio tanto físico, intelectual como espiritual. El segundo es una “Formación general” que privilegie el razonamiento y la creatividad, dando énfasis al lenguaje, la comunicación y el pensamiento lógico matemático. Y por último, una “Formación Técnico Profesional” que fortalezca aprendizajes significativos que permitan desarrollar competencias requeridas, tanto para desarrollarse en la vida laboral como para continuar estudios superiores.

Área Técnico Profesional

Este colegio busca formar profesionales de alta calidad moral y laboral en todas las especialidades que se imparten, ya sea para incorporarse de forma inmediata al mundo del trabajo o para seguir perfeccionándose, “para contribuir así al desarrollo de la región y el país”, indica la directora. “Para el caso de los estudiantes que opten por continuar sus estudios, su paso por el Liceo es una muy buena base para estudiar una carrera afín”, complementa el profesor Víctor Campusano.

Para la formación técnico profesional el establecimiento cuenta con estrategias de alternancia, en que se combina la formación del Liceo con otros lugares de aprendizaje, como empresas, Centros de Formación Técnica e Institutos de Educación Superior.

En la especialidad de Construcción mención Edificación, se utiliza la alternancia dual, modalidad que permite a los estudiantes desarrollar sus aprendizajes tres días en el Liceo y dos días en las empresas. “Esta vinculación permite que el estudiante compruebe en terreno las actividades que realizará en el futuro y además desarrolla competencias para el trabajo en equipo y relaciones humanas”, destaca Campusano.

La directora también destaca el enfoque de “Aprendizaje Servicio”, el cual consiste en la implementación de proyectos pedagógicos que son ejecutados en organizaciones territoriales de la zona.

Fundación Irarrázaval

Marcela Noriel afirma que el primer gran aporte de la Fundación Irarrázaval al Liceo es para la formación espiritual y trabajo pastoral. “En el entendido de que la educación busca el desarrollo de la persona en su integralidad, como un ser con cuerpo y alma, llamado a perfeccionarse en comunidad, mediante su facultad de apertura hacia los demás, hacia el mundo y hacia la trascendencia”, revela.

Asimismo, la directora destaca el aporte respecto al desarrollo profesional de los docentes, donde la RED Irarrázaval contribuye significativamente en la capacitación, permitiendo fortalecer la práctica pedagógica mediante la actualización y profundización de los conocimientos disciplinarios.

 

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