Centro Educacional Menesiano Culiprán: Innovación, excelencia y valores cristianos en el mundo rural.



En este reportaje te invitamos a conocer el Centro Educacional Menesiano Culiprán, colegio ubicado en un sector rural de la comuna de Melipilla que forma de nuestra RED desde 1997.

Nombre: Centro Educacional Menesiano Culiprán

Matrícula: 1239 alumnos

Cursos: Prekínder a IV Medio

Especialidad Técnico Profesional: Agropecuaria mención Agricultura

El colegio también ofrece la opción de educación Científico Humanista

Comuna: Melipilla

 El Centro Educacional Menesianos de Culiprán es un colegio que ofrece formación científico humanista y también técnico profesional a través de la especialidad Agropecuaria, mención Agricultura, ya que está ubicado en pleno campo chileno. Por lo mismo, cuenta con un internado masculino y otro femenino, con el fin de entregar formación técnica agropecuaria a jóvenes de zonas rurales alejadas. El colegio tiene también un proyecto de integración lo que permite recibir a estudiantes con necesidades educativas especiales.

El establecimiento pone énfasis en una malla curricular que opta por la innovación permanente, incorporando nuevas técnicas de aprendizaje y nuevas tecnologías. Para conocer más sobre el colegio nos comunicamos con su directora, Cecilia Farías, y su sostenedor, el Hermano Ignacio Morso, ellos nos contaron que el colegio Menesiano es un punto de referencia social del entorno, que colabora con diferentes alternativas al servicio de la comunidad.


Los Menesianos son una congregación religiosa laica católica dedicada a la enseñanza fundada en 1819 en Francia. Hace 38 años llegaron a Culiprán, una zona rural de la comuna de Melipilla, y se hicieron cargo de una escuela municipal que, en ese entonces, no tenía más de 200 alumnos.

Los Hermanos José Antonio Vivas, Dámaso Cereceda y Joaquín Blanco, junto con el equipo docente, hicieron crecer la escuela. Desde entonces han tenido que superar distintas adversidades, como el terremoto de 1985 que destruyó Melipilla, pero gracias a la preocupación y el seguimiento de las familias, han podido crecer. Hoy son más de 1200 alumnos y el colegio cuenta con un equipo de profesores comprometido con los alumnos y sus familias.

La zona de Culiprán se ha desarrollado gracias al sector agropecuario, lo que ha permitido un crecimiento económico y social del entorno. El colegio ofrece la especialidad de técnico agrícola ya que está ubicado en un lugar donde predomina esta actividad.

El colegio es una escuela técnica agrícola con mención en agricultura y ha ampliado la formación de sus estudiantes con la rama pecuaria, competencia certificada por la Universidad de Chile. Se cuenta con terreno ganadero y de frutales, lo que permite desarrollar los aprendizajes

Cecilia Farías y el Hermano Ignacio Morso, agregan que, con el fin de apostar por la excelencia y la especialización, se creó un laboratorio de técnicas de riego e invernadero tecnificado, que fue posible gracias al apoyo de Fundación Irarrázaval.

Por otro lado, desde hace seis años el establecimiento está comprometido con innovación pedagógica, desde el aprendizaje cooperativo, el trabajo por proyectos de comprensión y una educación para la comprensión en la línea del Proyecto Zero. Se realizó una pasantía de tres años en España y diferentes cursos de capacitación con la Fundación Seminarium. El proyecto ha supuesto un rediseño de aulas y espacios de trabajo. Según señala su directora, se busca un concepto de escuela que favorezca el intercambio y la innovación en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

El colegio también ha apostado por la formación humana y en valores cristianos ofreciendo diferentes experiencias pastorales: misiones, voluntariado, encuentros menejovenes, eucaristías semanales, encuentros con Cristo, clases de religión y el cultivo de la interioridad. Actualmente, gracias al apoyo de la Fundación Irarrázaval se está construyendo la capilla del colegio.


El Colegio Menesiano Culiprán forma parte de la RED desde 1997. Desde ese año tienen el apoyo incondicional de Fundación Irarrázaval para su desarrollo y crecimiento.

El Hermano Ignacio Morso señala que formar parte de la RED Irarrázaval ha sido una oportunidad para instaurar la mejora continua en el desarrollo de su misión y visión. Los valores humanos y religiosos compartidos, y el intercambio de experiencias e iniciativas con diferentes centros educativos, los ha ayudado a mirar hacia delante y apostar por la innovación.

“Gracias a la Fundación hemos podido ofrecer los mejores recursos de calidad para nuestros alumnos y alumnas de zonal rural. Viendo cómo ellos aspiran, cada vez más, a una formación técnico de nivel superior de calidad y mejorando la calidad de vida de nuestros alumnos y sus familias”, señala el sostenedor.

El Colegio Menesiano Culiprán está en una zona rural de la Región Metropolitana y queremos que esos alumnos reciban una formación integral, potente en saberes, en valores y en habilidades para la vida. Estamos encantados que formen parte de nuestra RED desde hace más de 20 años.  

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